De esta súplica es evidente que el corazón de Gedeón se vio afectado y que solo deseaba pruebas adicionales de la autoridad que se le había dado. Y más bien me inclino a pensar que, como en casos anteriores a Israel, en las apariciones que les hizo este ángel, a quien no podemos suponer que Gedeón estaba tan poco familiarizado con la historia de la iglesia como para no saberlo, recordó que el Señor había manifestado más plenamente quién era él en el momento de ofrecer el sacrificio.

Gedeón oró para que él también pudiera tener el privilegio de ofrecerlo en la presente ocasión. Ver Génesis 15:7 .

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