• Esdras 9:5

    A la hora del sacrificio de la tarde me levanté de mi aflicción, y con mi vestidura y mi manto rasgados me postré de rodillas, extendí mis manos al SEÑOR mi Dios,

  • Esdras 9:6

    y dije: “Dios mío, estoy avergonzado y afrentado como para levantar mi cara a ti, oh Dios mío; porque nuestras iniquidades se han multiplicado sobre nuestras cabezas, y nuestra culpa ha crecido hasta los cielos.

Continúa después de la publicidad