• Gálatas 4:4

    Pero cuando vino la plenitud del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley,

  • Gálatas 4:5

    para que redimiera a los que estaban bajo la ley a fin de que recibiéramos la adopción de hijos.

  • Gálatas 4:6

    Y por cuanto son hijos, Dios envió a nuestro corazón el Espíritu de su Hijo que clama: “Abba, Padre”.

  • Gálatas 4:7

    Así que ya no eres más esclavo sino hijo; y si hijo, también eres heredero por medio de Dios.

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