• Hechos 8:1

    Y Saulo consentía en su muerte. Saulo persigue a la iglesia En aquel día se desató una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén, y todos fueron esparcidos por las regiones de Judea y de Samaria, con excepción de los apóstoles.

  • Hechos 8:2

    Unos hombres piadosos sepultaron a Esteban, e hicieron gran lamentación por él.

  • Hechos 8:3

    Entonces Saulo asolaba a la iglesia. Entrando de casa en casa, arrastraba tanto a hombres como a mujeres y los entregaba en la cárcel.

  • Hechos 8:4

    Entonces, los que fueron esparcidos anduvieron anunciando la palabra.

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