• Jonás 1:2

    “Levántate y ve a Nínive, la gran ciudad, y predica contra ella porque su maldad ha subido a mi presencia”.

  • Jonás 1:3

    Entonces Jonás se levantó para huir de la presencia del SEÑOR a Tarsis. Descendió a Jope y halló un barco que iba a Tarsis; y pagando su pasaje entró en él para irse con ellos a Tarsis huyendo de la presencia del SEÑOR.

  • Jonás 1:4

    Pero el SEÑOR lanzó un gran viento sobre el mar y se produjo una enorme tempestad de manera que el barco estaba a punto de romperse.

  • Jonás 1:5

    Los marineros tuvieron miedo y cada uno invocaba a su dios. Y echaron al mar el cargamento que había en el barco para aligerarlo. Pero Jonás había bajado al fondo del barco, se había acostado y se había quedado profundamente dormido.

  • Jonás 1:6

    El capitán del barco se acercó a Jonás y le dijo: — ¿Qué te pasa dormilón? ¡Levántate e invoca a tu dios! Quizás él se fije en nosotros y no perezcamos.

Continúa después de la publicidad