• Juan 12:37

    Pero, a pesar de haber hecho tantas señales delante de ellos, no creían en él

  • Juan 12:38

    para que se cumpliera la palabra del profeta Isaías que dijo: Señor, ¿quién ha creído a nuestro mensaje? ¿A quién se ha revelado el brazo del Señor?.

  • Juan 12:39

    Por eso no podían creer, porque Isaías dijo en otra ocasión:

  • Juan 12:40

    Él ha cegado los ojos de ellos y endureció su corazón, para que no vean con los ojos ni entiendan con el corazón, ni se conviertan, y yo los sane.

  • Juan 12:41

    Estas cosas dijo Isaías porque vio su gloria y habló acerca de él.

  • Juan 12:42

    No obstante, aun de entre los dirigentes muchos creyeron en él, pero por causa de los fariseos no lo confesaban para no ser expulsados de la sinagoga.

  • Juan 12:43

    Porque amaron la gloria de los hombres más que la gloria de Dios.

  • Juan 12:44

    Pero Jesús alzó la voz y dijo: “El que cree en mí, no cree en mí sino en el que me envió;

  • Juan 12:45

    y el que me ve a mí, ve al que me envió.

  • Juan 12:46

    Yo he venido al mundo como luz para que todo aquel que cree en mí no permanezca en las tinieblas.

  • Juan 12:47

    Si alguien oye mis palabras y no las guarda yo no lo juzgo; porque yo no vine para juzgar al mundo sino para salvar al mundo.

  • Juan 12:48

    El que me desecha y no recibe mis palabras tiene quien lo juzgue: La palabra que he hablado lo juzgará en el día final.

  • Juan 12:49

    Porque yo no hablé por mí mismo; sino que el Padre que me envió, él me ha dado mandamiento de qué he de decir y de qué he de hablar.

  • Juan 12:50

    Y sé que su mandamiento es vida eterna. Así que lo que yo hablo, lo hablo tal y como el Padre me ha hablado”.

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