• Lucas 14:25

    Grandes multitudes iban con él, y él se volvió y les dijo:

  • Lucas 14:26

    “Si alguno viene a mí y no aborrece a su padre, madre, mujer, hijos, hermanos, hermanas y aun su propia vida, no puede ser mi discípulo.

  • Lucas 14:27

    Y cualquiera que no toma su propia cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo.

  • Lucas 14:28

    Porque ¿cuál de ustedes, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla?

  • Lucas 14:29

    No sea que después de haber puesto los cimientos, y al no poderla terminar, todos los que la vean comiencen a burlarse de él

  • Lucas 14:30

    diciendo: ‘Este hombre comenzó a edificar, y no pudo acabar’.

  • Lucas 14:31

    ¿O qué rey, que sale a hacer guerra contra otro rey, no se sienta primero y consulta si puede salir con diez mil al encuentro del que viene con veinte mil?

  • Lucas 14:32

    De otra manera, cuando el otro rey está todavía lejos, le envía una embajada y pide condiciones de paz.

  • Lucas 14:33

    Así, pues, cualquiera de ustedes que no renuncie a todas las cosas que posee, no puede ser mi discípulo.

  • Lucas 14:34

    “Buena es la sal; pero si la sal se vuelve insípida, ¿con qué será sazonada?

  • Lucas 14:35

    No es buena ni para la tierra ni para abono; por eso la arrojan fuera. Quien tiene oídos para oír, oiga”.

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