• Lucas 8:4

    Juntándose una gran multitud y los que de cada ciudad acudían a él, les habló por medio de una parábola:

  • Lucas 8:5

    “Un sembrador salió a sembrar su semilla. Mientras sembraba, una parte cayó junto al camino y fue pisoteada; y las aves del cielo la comieron.

  • Lucas 8:6

    Otra parte cayó sobre la roca y, cuando creció, se secó porque no tenía humedad.

  • Lucas 8:7

    Otra parte cayó entre los espinos, y los espinos crecieron al mismo tiempo y la ahogaron.

  • Lucas 8:8

    Y otra parte cayó en buena tierra y, cuando creció, llevó fruto a ciento por uno”. Hablando de estas cosas, exclamó: “El que tiene oídos para oír, oiga”.

  • Lucas 8:9

    Sus discípulos le preguntaron qué significaba esta parábola.

  • Lucas 8:10

    Y él dijo: “A ustedes se les ha concedido conocer los misterios del reino de Dios; pero a los demás en parábolas para que viendo no vean, y oyendo no entiendan.

  • Lucas 8:11

    “Esta es, pues, la parábola: La semilla es la palabra de Dios.

  • Lucas 8:12

    Los de junto al camino son los que oyen pero luego viene el diablo y quita la palabra de sus corazones para que no crean y sean salvos.

  • Lucas 8:13

    Los de sobre la roca son los que, cuando oyen, reciben la palabra con gozo. Pero estos no tienen raíz; por un tiempo creen y en el tiempo de la prueba se apartan.

  • Lucas 8:14

    En cuanto a la parte que cayó entre los espinos, estos son los que oyeron pero, mientras siguen su camino, son ahogados por las preocupaciones, las riquezas y los placeres de la vida, y no llegan a la madurez.

  • Lucas 8:15

    Pero en cuanto a la parte que cayó en buena tierra, estos son los que, al oír con corazón bueno y recto, retienen la palabra oída y llevan fruto con perseverancia.

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