• Marco 14:39

    De nuevo se apartó y oró diciendo las mismas palabras.

  • Marco 14:40

    Cuando vino otra vez, los halló durmiendo porque los ojos de ellos estaban cargados de sueño. Y no sabían qué responderle.

  • Marco 14:41

    Volvió por tercera vez y les dijo: — ¿Todavía están durmiendo y descansando? Basta ya. La hora ha venido. He aquí, el Hijo del Hombre es entregado en manos de los pecadores.

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