• Marco 3:10

    porque había sanado a muchos, de modo que le caían encima todos cuantos tenían plagas, para tocarlo.

  • Marco 3:11

    Y los espíritus inmundos, siempre que lo veían se postraban delante de él y gritaban diciendo: “¡Tú eres el Hijo de Dios!”.

  • Marco 3:12

    Pero él los reprendía mucho para que no lo dieran a conocer.

  • Marco 3:13

    Entonces subió al monte y llamó a sí a los que él quiso, y fueron a él.

  • Marco 3:14

    Constituyó a doce, a quienes nombró apóstoles, para que estuvieran con él, y para enviarlos a predicar

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