• Marco 5:35

    Mientras él aún hablaba, vinieron de la casa del principal de la sinagoga diciendo: — Tu hija ha muerto. ¿Para qué molestas más al Maestro?

  • Marco 5:36

    Pero Jesús, sin hacer caso a esta palabra que se decía, dijo al principal de la sinagoga: — No temas; solo cree.

  • Marco 5:37

    Y no permitió que nadie lo acompañara, sino Pedro, Jacobo y Juan, el hermano de Jacobo.

  • Marco 5:38

    Llegaron a la casa del principal de la sinagoga, y él vio el alboroto y a los que lloraban y lamentaban mucho.

  • Marco 5:39

    Y al entrar les dijo: — ¿Por qué hacen alboroto y lloran? La niña no ha muerto sino que duerme.

  • Marco 5:40

    Ellos se burlaban de él. Pero él los sacó a todos, y tomó al padre y a la madre de la niña y a los que estaban con él, y entró a donde estaba la niña.

  • Marco 5:41

    Tomó la mano de la niña y le dijo: — Talita, cumi (que traducido es: Niña, a ti te digo, levántate).

  • Marco 5:42

    Y en seguida la niña se levantó y andaba, pues tenía doce años. Y quedaron atónitos.

  • Marco 5:43

    Él les mandó estrictamente que nadie lo supiera y ordenó que le dieran a ella de comer.

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