• Marco 6:45

    En seguida obligó a sus discípulos a entrar en la barca para ir delante de él a Betsaida, en la otra orilla, mientras él despedía a la multitud.

  • Marco 6:46

    Y habiéndose despedido de ellos, se fue al monte a orar.

  • Marco 6:47

    Al caer la noche, la barca estaba en medio del mar, y él solo en tierra.

  • Marco 6:48

    Viendo que ellos se fatigaban remando porque el viento les era contrario, a la madrugada, él fue a ellos caminando sobre el mar, y quería pasarlos de largo.

  • Marco 6:49

    Pero cuando ellos vieron que él caminaba sobre el mar, pensaron que era un fantasma y clamaron a gritos;

  • Marco 6:50

    porque todos lo vieron y se turbaron. Pero en seguida habló con ellos y les dijo: “¡Tengan ánimo! ¡Yo soy! ¡No teman!”.

  • Marco 6:51

    Y subió a ellos en la barca, y se calmó el viento. Ellos estaban sumamente perplejos,

  • Marco 6:52

    pues aun no habían comprendido lo de los panes; más bien, sus corazones estaban endurecidos.

  • Marco 6:53

    Y cuando cruzaron a la otra orilla, llegaron a la tierra de Genesaret y amarraron la barca.

  • Marco 6:54

    Pero cuando ellos salieron de la barca, en seguida la gente lo reconoció.

  • Marco 6:55

    Recorrieron toda aquella región, y comenzaron a traer en camillas a los que estaban enfermos a donde oían que él estaba.

  • Marco 6:56

    Dondequiera que entraba, ya sea en aldeas o ciudades o campos, ponían en las plazas a los que estaban enfermos, y le rogaban que solo pudieran tocar el borde de su manto. Y todos los que lo tocaban quedaban sanos.

Continúa después de la publicidad