- 
                
                
no des sueño a tus ojos ni dejes dormitar tus párpados.
             
                    - 
                
                
Escapa como el venado de mano del cazador, como ave de mano del que tiende la red. 
             
                    - 
                
                
Ve a la hormiga, oh perezoso; observa sus caminos y sé sabio.
             
                    - 
                
                
Ella no tiene jefe ni comisario ni gobernador;
             
                    - 
                
                
pero prepara su comida en el verano, y guarda su sustento en el tiempo de la siega.
             
                    - 
                
                
Perezoso: ¿Hasta cuándo has de estar acostado? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño?
             
                    - 
                
                
Un poco de dormir, un poco de dormitar y un poco de cruzar las manos para reposar.
             
                    - 
                
                
Así vendrá tu pobreza como un vagabundo, y tu escasez como un hombre armado. 
             
            
    
    
    
            Continúa después de la publicidad