• Salmo 140:4

    Guárdame, oh SEÑOR, de manos del impío; protégeme del hombre violento, quienes han planeado trastornar mis pasos.

  • Salmo 140:5

    Los arrogantes me han escondido trampa y cuerdas; han tendido red junto a la senda y me han puesto lazos. Selah

Continúa después de la publicidad