• Tito 1:5

    Por esta causa te dejé en Creta: para que pusieras en orden lo que faltase y establecieras ancianos en cada ciudad, como te mandé.

  • Tito 1:6

    Sea el anciano irreprensible, marido de una sola mujer, que tenga hijos creyentes que no sean acusados como libertinos o rebeldes.

  • Tito 1:7

    Porque es necesario que el obispo sea irreprensible como mayordomo de Dios; que no sea arrogante ni de mal genio ni dado al vino ni pendenciero ni ávido de ganancias deshonestas.

Continúa después de la publicidad