• 1 Tesalonicenses 2:6

    Tampoco buscamos gloria de parte de los hombres, ni de ustedes ni de otros; aunque podríamos haberles sido carga como apóstoles de Cristo.

  • 1 Tesalonicenses 2:7

    Más bien, entre ustedes fuimos tiernos, como la nodriza que cría y cuida a sus propios hijos.

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