• 1 Timoteo 3:10

    Que estos sean probados primero y que después sirvan como diáconos, si es que son hallados irreprensibles.

  • 1 Timoteo 3:11

    Las mujeres, asimismo, deben ser dignas de respeto, no calumniadoras, sobrias, fieles en todo.

  • 1 Timoteo 3:12

    Los diáconos sean maridos de una sola mujer que gobiernen bien a sus hijos y sus propias casas.

  • 1 Timoteo 3:13

    Porque los que sirven bien como diáconos ganan para sí buena reputación y mucha confianza en la fe que es en Cristo Jesús.

  • 1 Timoteo 3:14

    Te escribo esto, esperando ir a verte pronto,

  • 1 Timoteo 3:15

    para que, si me tardo, sepas cómo te conviene conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y fundamento de la verdad.

  • 1 Timoteo 3:16

    Indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Él fue manifestado en la carne, justificado por el Espíritu, visto por los ángeles, proclamado entre las naciones, creído en el mundo, y recibido arriba en gloria.

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