Ni hemos escuchado a tus siervos los profetas, que hablaron en tu nombre a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros padres, ya todo el pueblo de la tierra.

Ni hemos escuchado a tus siervos los profetas, que hablaron en tu nombre a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros padres ya todo el pueblo. Ellos advirtieron a todos sin miedo, sin respeto a las personas.

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