Sin embargo, en medio de la destrucción, quedará un remanente - no de personas justas, sino algunos de los culpables, quienes deberán "salir" de la destrucción de Jerusalén hacia Babilonia, para llevar una vida de exilio sin esperanza allí. Aquí la referencia es al juicio, no a la misericordia, como se muestra.

Verán su camino y sus obras: y se consolarán - vosotros, los exiliados en Chebar, que ahora murmuran por el juicio de Dios que se inflije a Jerusalén como algo severo, cuando veáis los "caminos" y el carácter malvado del remanente que escapó, reconoceréis que tanto Jerusalén como sus habitantes merecían su destino: este reconocimiento de la justicia del juicio os reconciliará con él, y así "os consolaréis" bajo él (Calvino). Luego vendría la misericordia para el remanente elegido, aunque eso no se menciona aquí.

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