Génesis 9:1

Y bendijo Dios a Noé y a sus hijos, y les dijo: Fructificad y multiplicaos, y llenad la tierra.

Y bendijo Dios a Noé y a sus hijos. En el mundo ahora expurgado, Noé sostuvo el carácter y ocupó el cargo de segundo padre representante de la raza humana. Dado que la economía de la Providencia iba a desarrollarse en adelante sobre un plan diferente al del mundo antediluviano, se hizo otro pacto para la preservación del hombre en el nuevo orden de cosas. Se le dió una nueva carta de privilegios, plasmada en un breve y simple pero majestuoso código de leyes fundamentales, para la guía autorizada de todas las generaciones futuras; y esta promulgación legislativa se representa más apropiadamente como procedente de Dios ( ' Elohiym ( H430 )), el gobernante supremo. Aquí se vuelve a publicar la ley de la naturaleza que fue anunciada a Adán, que consta, como lo hizo originalmente, de varias partes.

Sed fecundos... La primera parte se refiere a la transmisión de la vida, siendo reanunciada la bendición original con las mismas palabras con las que había sido prometida al principio.