Y alzando ellos sus ojos de lejos, y no reconociéndole, alzaron su voz, y lloraron; y rasgaron cada uno su manto, y esparcieron polvo sobre sus cabezas hacia el cielo.

Hacia el cielo Arrojaron violentas cenizas hacia arriba, para que cayesen sobre sus cabezas y los cubrieran. Indicación del luto más profundo ( Josué 7:6 ; Hechos 22:23 ).

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