Reuníos y venid, naciones todas, y juntaos en derredor; haced descender allá, oh SEÑOR, a tus valientes.

Reúnanse - 'Apresúrense' (Maurer).

Allá: al valle de Josafat.

Porque tus poderosos - los guerreros que se creen "poderosos", pero que están en ese mismo lugar para ser derrocados por Yahweh (Maurer). Compárese con "los valientes" (). Más bien, Joel habla de los realmente "poderosos" de Dios (sus ángeles), en contraste con los autodenominados "hombres poderosos" ( cf., "El príncipe (ángel maligno) del reino de Persia se me opuso... pero, he aquí, Miguel, uno de los principales príncipes, vino a ayudarme"). Auberlen comenta: Un profeta complementa al otro, porque todos profetizaron sólo "en parte". Lo que era oscuro para uno se revelaba para el otro: lo que uno describe brevemente lo es más plenamente para otro.

Daniel llama rey al Anticristo y se detiene en sus conquistas mundanas; Juan mira más a su tiranía espiritual, por lo que añade una segunda bestia, con apariencia de espiritualidad. El anticristo mismo es descrito por Daniel. Isaías ( Isaías 29:1 ), Joel ( Joel 3:1 ) y Zacarías ( Zacarías 12:1 ; Zacarías 13:1 ; Zacarías 14:1 ) describen su ejército de seguidores paganos que se enfrenta a Jerusalén, pero no al Anticristo mismo.

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