Y levantaron sobre él un gran montón de piedras hasta el día de hoy. Así se apartó Jehová del furor de su ira. Por lo cual se llamó el nombre de aquel lugar, Valle de Acor, hasta el día de hoy.

Levantaron sobre él una gran cabeza de piedras. Todavía es costumbre levantar túmulos sobre las tumbas de criminales o personas infames en Oriente. Todo árabe honrado, al pasar junto a la tumba de un ladrón, indica su desprecio por el crimen y por su perpetrador añadiendo una piedra al túmulo (cf. Josué 8:29 ; 2 Samuel 18:17 ).

Llamado, El valle de Acor (turbulencia), hasta el día de hoy. Un episodio tan doloroso daría notoriedad al lugar; y es notado más de una vez por los escritores sagrados de una época posterior ( Isaías 65:10 ; Oseas 2:15 ). Es el mismo que en épocas posteriores se conocía como "el arroyo Querit, que está frente al Jordán" (ver la nota en 1 Reyes 17:1 ), ahora Wady el-Kelt.

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