Y entonces enviará a sus ángeles, y juntará a sus escogidos de los cuatro vientos, desde lo último de la tierra hasta lo último de los cielos.

Y entonces enviará a sus ángeles - "con un gran sonido de trompeta",

Y juntará a sus escogidos de los cuatro vientos, desde lo último de la tierra hasta lo último de los cielos. Así como en la antigüedad se reunían las tribus de Israel al son de la trompeta (Salmo 81:3 ), por lo que cualquier reunión poderosa del pueblo de Dios, por mandato divino, se representa como reunida al sonido de la trompeta y el ministerio de los ángeles, empleado en todas las grandes operaciones de la Providencia, se presenta aquí como el medio por el cual se llevará a cabo la presente asamblea de los elegidos.

Lightfoot lo explica así: 'Cuando Jerusalén sea reducida a cenizas, y esa nación inicua sea cortada y rechazada, entonces el Hijo del hombre enviará a Sus ministros con la trompeta del Evangelio, y ellos reunirán a Sus escogidos de las diversas naciones, de los cuatro ángulos del cielo: para que a Dios no le falte una Iglesia, aunque su antiguo pueblo sea desechado; pero siendo destruida esa antigua Iglesia judía, una nueva Iglesia será llamada de entre los gentiles.

Pero aunque algo como esto parece ser el sentido principal del versículo, en relación con la destrucción de Jerusalén, nadie puede dejar de ver que el lenguaje crece más allá de cualquier reunión de la familia humana en una Iglesia sobre la tierra, y obliga a los pensamientos hacia esa reunión de la Iglesia "a la trompeta final", para encontrarse con el Señor en el aire, que  termina la escena actual. Sin embargo, este no es, a nuestro juicio, el tema directo de la predicción; porque el siguiente versículo limita toda la predicción a la generación existente en ese momento.

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