También en el día de vuestra alegría, y en vuestros días solemnes, y en los comienzos de vuestros meses, tocaréis las trompetas sobre vuestros holocaustos, y sobre los sacrificios de vuestras ofrendas de paz, para que os sirvan de memoria ante vuestro Dios: Yo soy el SEÑOR vuestro Dios.

También en el día de vuestra alegría, es decir, las ocasiones festivas y de acción de gracias debían iniciarse con las trompetas, como todas las fiestas posteriores ( Salmo 81:3 ; 2 Crónicas 29:27 ), para dar a entender los sentimientos de alegría y deleite con que se dedicaban al servicio de Dios.

Pero este versículo da a entender, lo que aprendemos en otros lugares ( Deuteronomio 14:26 ; Deuteronomio 16:11 ; Deuteronomio 16:14 : cf. 1 Samuel 1:3 ; 1 Samuel 1:24 ; 1 Samuel 2:1 :12-16,19 ), que durante las festividades públicas era frecuente que los particulares hicieran sacrificios privados u ofrendas voluntarias, por conveniencia, cuando se encontraban en el lugar de culto establecido.

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