El arbol de la Vida. Llamado así, porque tenía esa cualidad, que al comer de su fruto, el hombre se habría conservado en un estado constante de salud, vigor y fuerza, y no habría muerto en absoluto. El árbol del conocimiento. A lo que la serpiente engañosa atribuyó falsamente el poder de impartir un tipo de conocimiento superior al que Dios se complació en dar. (Challoner) --- De qué especies eran estos dos maravillosos árboles, los eruditos no están de acuerdo.

El árbol del conocimiento, no pudo comunicar ninguna sabiduría al hombre; pero, al comer de su fruto prohibido, Adán compró caro el conocimiento del mal, al que estaba ante un extraño. Algunos dicen que era la higuera, otros un manzano, Cantar de los Cantares VIII. 5. Pero probablemente no coincidía con ninguna especie de árboles que conozcamos, ni tampoco había tal vez ninguna de la misma clase en el paraíso. (Tirino)

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad