Si un hombre tiene un hijo terco y rebelde, que disputa la patria potestad en disposición y obra, que no obedece a la voz de su padre ni a la voz de su madre, siendo incorregiblemente desobediente y refractario, y que, cuando lo han castigado, lo han castigado de acuerdo con la obligación que recae sobre ellos, no los escuchará,

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad