No temáis, ni tengáis miedo, con la desconfianza de Jehová, por un lado, y el terror de los dioses paganos, por el otro. ¿No te lo he dicho desde entonces y lo he declarado? a saber, la absoluta vanidad de los ídolos paganos. Vosotros sois incluso Mis testigos, que debéis admitir la verdad de esta afirmación. ¿Hay un Dios [verdadero] a mi lado? La pregunta enfática es respondida con igual precisión: Sí, no hay [otro] Dios verdadero ; No conozco ninguno, ni siquiera el Dios omnisciente es incapaz de nombrar uno. La actitud de los hombres con respecto a este único Dios verdadero decide su destino eterno.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad