Y primero, es decir, para empezar, recompensaré su iniquidad y su pecado el doble, en el doble de la medida en que cometieron sus malas acciones; porque han profanado mi tierra, profanando la tierra que le era consagrada; Han llenado Mi heredad, lo que Él les había dado para poseer como propio, con los cadáveres de sus cosas detestables y abominables, con sus ídolos muertos y abominables.

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