Como pájaro errante, arrojado del nido

El malestar del pecador

La imagen representa la angustia y el desconcierto del malhechor.

No sabe si volver a la puerta vieja y llamarla con la esperanza de que alguna mano amable le vuelva a abrir, o huir a la tierra de las tinieblas y el silencio. "No hay paz, dice mi Dios, para los impíos". ( J. Parker, DD )

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