Y sucederá que, si el impío es digno de ser golpeado, el juez hará que se acueste y que le azoten delante de la cara, según su falta, por cierto número.

Ver. 2. Ser golpeado en la cara. ] Los turcos, cuando son cruelmente azotados, se ven obligados a volver al juez que lo ordenó, besarle la mano, agradecerle y pagarle al oficial que los azotó.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad