Este es el discípulo que da testimonio de estas cosas, y escribió estas cosas; y sabemos que su testimonio es verdadero.

Ver. 24. Este es el discípulo ] No el médico, el maestro, como Magistri nostri Parisienses. Así que habrá que estilizar a los sorbonistas. Los escolares tienen su Doctor Angelicus, Doctor Seraphicus, Doctor resolutissimus. Por eso se llamó a Bacon el Carmelita, porque no soportaría ninguna conjetura ni tal vez. Los frailes italianos, a medida que aumentan en su supuesta santidad, así proceden en sus títulos, desde el Padre Benedicto hasta el Padre Angelo, luego Archangelo, Cherubino, y por último, Cerephino, que es la cumbre de la perfección.

Nuestro evangelista no se deleita en ninguno de estos titulares títulos. Ni siquiera se nombra a sí mismo en toda esta obra suya, no adopta otro estilo que el del discípulo amado, no se hace más que un testigo de la verdad, un registrador de lo que había oído y visto. La persona orgullosa habla "grandes palabras de vanidad hinchadas", 2 Pedro 2:18 ; ama los aposentos superiores, y ser llamado rabino, rabino, ser llorado y señalado por alguien que no es tal, Mateo 23:6 .

Escuché, dice Tertuliano (hablando del Papa, que entonces comenzó a asomarse), que hay un decreto publicado en términos perentorios, Pontifex scilicet Maximus, Episcopus episcoporum, etc. "Siempre odié el orgullo de esa Iglesia Romana", dice Basil. una ambición, como el cocodrilo, crece mientras vive; como la hiedra, que se eleva a los pies, sobrepasa el muro más alto; o, como la caléndula (flor de mal olor), que se abre y se cierra con el sol.

La humildad, por el contrario, es como el lirio, dice Bernardo, o la violeta que crece muy cerca del suelo, cuelga la cabeza hacia abajo y se esconde con sus propias hojas. Prefiere el Euge bien hecho de conciencia antes que el Hic est Esto es del mundo: y si no fuera que su fragante olor lo delata a la observación de los demás, optaría por vivir y morir en su bien contento secreto.

un Odi fastum illius ecclesiae. Hunc οφρυν δυτικην appellare solitus est.

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