Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento, y no comencéis a decir dentro de vosotros mismos: Tenemos a Abraham nuestro padre: porque os digo que puede Dios, aun de estas piedras dar hijos a Abraham.

Ver. 8. Ver Trapp en " Mat 3: 8 " Ver Trapp en " Mat 3: 9 "

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad