Mejor es para mí la ley de tu boca que millares de oro y plata.

Ver. 72. Mejor es para mí la ley de tu boca, etc. ] Porque, ¿qué es toda esta basura para ese verdadero tesoro, esos oráculos animados y vivificantes? Dionisio prefería dignamente a Platón antes que a Aristipo, porque uno siempre ansiaba dinero de él, pero los otros libros. Se informa de Platón que por tres libros selectos dio treinta mil platas o florines. Ahora, ¿qué eran todos sus libros para la Biblia? El culpable, entonces, fue el anabautista, quien dijo en la audiencia de Melancthon que no daría dos centavos por todas las Biblias del mundo (Joh. Maul. Loc. Com. 78).

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad