1-4 Los apóstoles predicaron por medio de Jesús la resurrección de los muertos. Incluye toda la felicidad del estado futuro; esto lo predicaron por medio de Jesucristo, que sólo se puede obtener por medio de él. Miserable es su caso, para quienes la gloria del reino de Cristo es una pena; pues como la gloria de ese reino es eterna, su pena será también eterna. Los siervos inofensivos y útiles de Cristo, como los apóstoles, han sido a menudo perturbados por su obra de fe y su trabajo de amor, cuando los hombres malvados han escapado. Y hasta el día de hoy no faltan casos en los que la lectura de las Escrituras, la oración social y la conversación religiosa se encuentran con ceños fruncidos y controles. Pero si obedecemos los preceptos de Cristo, él nos apoyará.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad