1-8 Cuando los hombres se vuelven eminentes por cosas en las que han tenido pocas ventajas, deberían ser más profundamente conscientes de que Dios ha sido su Maestro. Felices aquellos a quienes el Señor les da la más noble victoria, conquista y dominio sobre sus propios espíritus. Una oración por más misericordia se inicia adecuadamente con una acción de gracias por la misericordia anterior. Había un poder especial de Dios, que inclinaba al pueblo de Israel a estar sujeto a David; Era típico de poner almas en sujeción al Señor Jesús. Los días del hombre tienen poca sustancia, considerando cuántos pensamientos y preocupaciones de un alma que nunca muere se emplean sobre un cuerpo pobre y moribundo. La vida del hombre es como una sombra que desaparece. En su más alta exaltación terrenal, los creyentes recordarán cuán malos, pecaminosos y viles son en sí mismos; así se preservarán de la importancia y la presunción. El tiempo de Dios para ayudar a su pueblo es, cuando se están hundiendo, y todas las demás ayudas fallan.

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