soy la luz del mundo.

Él fue el sol que provocó el día de la vida y la esperanza del alma. Él derrama luz moral y espiritual sobre el mundo. Fue profetizado que daría vista a los ciegos. No solo abrió almas ciegas, sino también ojos ciegos. En ese momento estaba a punto de ser luz para quien había estado envuelto en tinieblas toda su vida.

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Nuevo Testamento