VERSO 29. Pero como el que nació según la carne persiguió al que nació según el Espíritu, así es ahora.

Nuestros oponentes culpan a nuestra doctrina por la agitación actual. Pero la nuestra es una doctrina de gracia y paz. No provoca problemas. Los problemas comienzan cuando la gente, las naciones y sus gobernantes de la tierra se enfurecen y se juntan en consejo contra el Señor y contra Su ungido. ( Salmo 2 . ) Pero todos sus consejos serán desbaratados.

"El que mora en los cielos se reirá: el Señor se burlará de ellos". ( Salmo 2:4 .) Que clamen contra nosotros tanto como quieran. Sabemos que ellos son la causa de todos sus propios problemas.

Mientras prediquemos a Cristo y lo confesemos como nuestro Salvador, debemos contentarnos con ser llamados alborotadores viciosos. "Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá; y todos estos hacen lo contrario de los decretos de César", así dijeron los judíos de Pablo y Silas. ( Hechos 17:6-7 ). De Pablo dijeron: "Hemos hallado a este hombre hombre pestilente, y promotor de sedición entre todos los judíos por todo el mundo, y cabecilla de la secta de los nazarenos". Los gentiles expresaron quejas similares: "Estos hombres perturban mucho nuestra ciudad".

Cristo previó la reacción del mundo al Evangelio. Él dijo: "Fuego he venido a enviar sobre la tierra, ¿y qué haré, si ya está encendido?" ( Lucas 12:49 .)

En una ocasión Jesús comentó: "Si fuerais del mundo, el mundo amaría a los suyos; pero como no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os odia". ( Juan 15:19 .) En otras palabras: "Yo soy la causa de todas vuestras angustias. Yo soy aquel por quien sois muertos. Si no confesarais mi nombre, el mundo no os odiaría. El siervo es no mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, a vosotros también os perseguirán.

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