Salmo 83:1

1 ¡Oh Dios! no guardes tu paz. En general, los comentaristas coinciden en que este salmo fue compuesto durante el reinado del rey Josafat; y en esta opinión, estoy de acuerdo. Ese rey piadoso, como es bien sabido, tuvo que entablar guerras terribles contra múltiples huestes de enemigos. Aunque los... [ Seguir leyendo ]

Salmo 83:2

2 Para, ¡mira! Tus enemigos son tumultuosos. Como argumento para hacer cumplir la oración del versículo anterior, se afirma que los fieles están oprimidos tanto por la violencia impetuosa como por la política astuta de sus enemigos, lo que, para toda apariencia humana, hizo que su escape de la muer... [ Seguir leyendo ]

Salmo 83:4

4 Ellos han dicho: Ven y déjanos dejar de ser una nación. La maldad de estos poderes hostiles se ve agravada por la circunstancia de que su propósito determinado era exterminar por completo a la Iglesia. Esto puede estar restringido a los amonitas y moabitas, que fueron como fuelle para hacer estal... [ Seguir leyendo ]

Salmo 83:5

5 Porque han consultado con el corazón juntos. Aquí se enumeran las huestes multiplicadas que unieron sus poderes para oponerse a la Iglesia de Dios y efectuar su derrocamiento. Como tantas naciones, formadas en una poderosa confederación, se empeñaron en la destrucción de un reino no muy distingui... [ Seguir leyendo ]

Salmo 83:9

9. Hazles lo mismo que a los madianitas. Los fieles, que se han quejado de las opresiones muy graves a las que fueron sometidos, con el fin de inducir a Dios a socorrerlos con mayor facilidad, ahora recuerdan las muchas ocasiones en que había brindado alivio a su pueblo, cuando lo llevaron a Las ci... [ Seguir leyendo ]

Salmo 83:12

12. Quien ha dicho, tomemos posesión de nosotros mismos las habitaciones de Dios. Estos enemigos paganos son nuevamente acusados ​​de traición contra el Rey del cielo, al apoderarse de su herencia como ladrones sin ley. No estarían, podemos estar seguros, admitir en tantas palabras que fue su inten... [ Seguir leyendo ]

Salmo 83:13

13. ¡Oh, Dios mío! hazlos como una bola giratoria. Como los impíos, cuando se ciñen y se preparan para destruir la Iglesia, generalmente se inflan con un orgullo intolerable, el bardo inspirado suplica a Dios que los avergüence, siendo imposible abatir su orgullo hasta que sean postrados, confundid... [ Seguir leyendo ]

Salmo 83:18

18. Y hazles saber que eres tú, tu nombre Jehová. No se habla aquí del conocimiento salvador de Dios, sino de ese reconocimiento de él que su poder irresistible extorsiona a los malvados. No se dice simplemente que sabrán que hay un Dios; pero se establece un tipo especial de conocimiento, ya que s... [ Seguir leyendo ]

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