Paráfrasis. —Porque es justo, amigos míos, que sepan que tuve que sufrir un sufrimiento muy severo en Éfeso y que incluso estuve a las puertas de la muerte. (9) Este gran peligro me enseñó que mi vida está en las manos de Dios, (10) porque Él me salvó del peligro, como Él me salva continuamente, (11) incluso mientras oraba por mí, para que usted y muchos pudieran da gracias por mi preservación. '

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