Aquí hay dos espadas ] Los discípulos pensaron que Jesús les aconsejó que compraran espadas para protegerlo del arresto. Señalaron, por tanto, que ya tenían dos, con los que estaban preparados para defenderlo. Al verse a sí mismo incomprendido, Jesús cerró abruptamente la conversación con las palabras, es suficiente, es decir, "¡basta de tonterías!" Tenía la intención de que los discípulos 'compraran espadas' (es decir, tomaran medidas) por su propia seguridad, no por la de él. Él mismo estaba decidido a morir, pero deseaba que sus vidas fueran preservadas.

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