Los hombres de Israel se volvieron de nuevo , etc. Dejaron la persecución de los benjamitas en el desierto y se dirigieron hacia la región de Benjamín. Los que vinieron a Guibeá y al campo, a quienes los israelitas ya habían destruido, eran hombres que sacaban espada, es decir, soldados. Pero había muchos labradores, pastores y otros, a quienes, en su furor, ahora mataron. Y todo lo que llegó a la mano Incluso mujeres y niños. Porque habían consagrado a la destrucción todo lo que no subía a Mizpa, cuando fueron convocados ( Jueces 21:5 ), lo cual no hizo ninguno de los de Benjamín; por lo cual también mataron a los hombres, mujeres y niños de Jabes de Galaad, Jueces 21:10. Pero esta fue ciertamente una barbarie sumamente inhumana, expresamente contraria a las leyes de Dios, que habían prohibido que el inocente fuera castigado con el culpable, Deuteronomio 24:16 .

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