(5) Ahora digo que Jesucristo fue ministro de la (f) circuncisión por la (g) verdad de Dios, para confirmar las promesas [hechas] a los padres:

(5) Una aplicación del ejemplo de Cristo a los judíos, a quienes concedió este honor por las promesas que hizo a sus padres, aunque fueron siempre tan indignos, en el sentido de que desempeñó el cargo de ministro entre ellos con maravillosa paciencia. Por tanto, mucho menos deben despreciarlos por ciertas faltas los gentiles, a quienes tanto estimó el Hijo de Dios.

(f) De los judíos circuncidados, mientras vivió, nunca salió de en medio de ellos.

(g) Que Dios pudiera ser visto como verdadero.

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