• Génesis 27:18

    Y él fue a su padre y le dijo: — Padre mío. Él respondió: — Heme aquí. ¿Quién eres, hijo mío?

  • Génesis 27:19

    Jacob respondió a su padre: — Yo soy Esaú, tu primogénito. He hecho lo que me dijiste. Por favor, levántate, siéntate y come de mi caza, para que tú me bendigas.

  • Génesis 27:20

    Entonces Isaac preguntó a su hijo: — ¿Cómo es que pudiste hallarla tan pronto, hijo mío? Él respondió: — Porque el SEÑOR tu Dios hizo que se encontrara delante de mí.

  • Génesis 27:21

    E Isaac dijo a Jacob: — Por favor, acércate y te palparé, hijo mío, a ver si tú eres mi hijo Esaú, o no.

  • Génesis 27:22

    Jacob se acercó a su padre Isaac, quien lo palpó y dijo: — La voz es la voz de Jacob, pero las manos son las manos de Esaú.

  • Génesis 27:23

    No lo pudo reconocer, porque sus manos parecían tan velludas como las manos de su hermano Esaú, y lo bendijo.

  • Génesis 27:24

    Le preguntó: — ¿Eres tú realmente mi hijo Esaú? Él respondió: — Sí, yo soy.

  • Génesis 27:25

    Le dijo: — Acércamela; comeré de la caza de mi hijo, para que yo te bendiga. Jacob se la acercó e Isaac comió. Le trajo también vino y bebió.

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