• Hechos 10:9

    Al día siguiente, mientras ellos iban viajando por el camino y llegaban cerca de la ciudad, Pedro subió a la azotea para orar, como al mediodía.

  • Hechos 10:10

    Sintió mucha hambre y deseaba comer; pero mientras preparaban la comida, le sobrevino un éxtasis.

  • Hechos 10:11

    Vio el cielo abierto y un objeto que descendía como un gran lienzo, bajado por sus cuatro extremos a la tierra.

  • Hechos 10:12

    En el lienzo había toda clase de cuadrúpedos y reptiles de la tierra y aves del cielo.

  • Hechos 10:13

    Y le vino una voz: — Levántate, Pedro; mata y come.

  • Hechos 10:14

    Entonces Pedro dijo: — ¡De ninguna manera, Señor! Porque ninguna cosa común o inmunda he comido jamás.

  • Hechos 10:15

    La voz volvió a él por segunda vez: — Lo que Dios ha purificado, no lo tengas tú por común.

  • Hechos 10:16

    Esto ocurrió tres veces, y de repente el objeto fue elevado al cielo.

  • Hechos 10:17

    Mientras Pedro estaba perplejo dentro de sí acerca de lo que pudiera ser la visión que había visto, he aquí los hombres enviados por Cornelio, habiendo preguntado por la casa de Simón, llegaron a la puerta.

  • Hechos 10:18

    Entonces llamaron y preguntaron si un Simón que tenía por sobrenombre Pedro se hospedaba allí.

  • Hechos 10:19

    Como Pedro seguía meditando en la visión, el Espíritu le dijo: “He aquí, tres hombres te buscan.

  • Hechos 10:20

    Levántate, pues, y baja. No dudes de ir con ellos, porque yo los he enviado”.

  • Hechos 10:21

    Entonces Pedro bajó para recibir a los hombres y dijo: — Heme aquí. Yo soy el que buscan. ¿Cuál es la causa por la que han venido?

  • Hechos 10:22

    Ellos dijeron: — Cornelio, un centurión, hombre justo y temeroso de Dios, como bien lo testifica toda la nación de los judíos, ha recibido instrucciones en una revelación por medio de un santo ángel, para hacerte venir a su casa y oír tus palabras.

  • Hechos 10:23

    Entonces les hizo entrar y los alojó. Al día siguiente, se levantó y fue con ellos. También le acompañaron algunos de los hermanos de Jope.

  • Hechos 10:24

    Al día siguiente, entraron en Cesarea. Cornelio los estaba esperando, habiendo invitado a sus parientes y a sus amigos más íntimos.

  • Hechos 10:25

    Cuando Pedro iba a entrar, Cornelio salió para recibirle, se postró a sus pies y le adoró.

  • Hechos 10:26

    Pero Pedro le levantó diciendo: — ¡Levántate! Yo mismo también soy hombre.

  • Hechos 10:27

    Mientras hablaba con él, entró y halló que muchos se habían reunido.

  • Hechos 10:28

    Y les dijo: — Ustedes saben cuán indebido le es a un hombre judío juntarse o acercarse a un extranjero, pero Dios me ha mostrado que a ningún hombre llame común o inmundo.

  • Hechos 10:29

    Por esto, al ser llamado, vine sin poner objeciones. Así que pregunto: ¿Por qué razón mandaron por mí?

  • Hechos 10:30

    Entonces dijo Cornelio: — Hace cuatro días como a esta hora, como las tres de la tarde, yo estaba orando en mi casa. Y he aquí, un hombre en vestiduras resplandecientes se puso de pie delante de mí

  • Hechos 10:31

    y dijo: “Cornelio, tu oración ha sido atendida, y tus obras de misericordia han sido recordadas ante la presencia de Dios.

  • Hechos 10:32

    Envía, por tanto, a Jope y haz venir a Simón, que tiene por sobrenombre Pedro. Él está alojado en casa de Simón el curtidor, junto al mar”.

  • Hechos 10:33

    Así que, inmediatamente envié a ti; y tú has hecho bien en venir. Ahora, pues, todos nosotros estamos aquí en la presencia de Dios, para oír todo lo que el Señor te ha mandado.

  • Hechos 10:34

    Entonces Pedro, abriendo su boca, dijo: — De veras, me doy cuenta de que Dios no hace distinción de personas,

  • Hechos 10:35

    sino que en toda nación le es acepto el que le teme y obra justicia.

  • Hechos 10:36

    Dios ha enviado un mensaje a los hijos de Israel, anunciando el evangelio de la paz por medio de Jesucristo. Él es el Señor de todos.

  • Hechos 10:37

    Ustedes saben el mensaje que ha sido divulgado por toda Judea, comenzando desde Galilea, después del bautismo que predicó Juan.

  • Hechos 10:38

    Me refiero a Jesús de Nazaret, y a cómo Dios le ungió con el Espíritu Santo y con poder. Él anduvo haciendo el bien y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.

  • Hechos 10:39

    Y nosotros somos testigos de todas las cosas que él hizo, tanto en la región de Judea como en Jerusalén. A él le mataron colgándole sobre un madero,

  • Hechos 10:40

    pero Dios le levantó al tercer día e hizo que apareciera,

  • Hechos 10:41

    no a todo el pueblo, sino a los testigos que Dios había escogido de antemano, a nosotros que comimos y bebimos con él después que resucitó de entre los muertos.

  • Hechos 10:42

    Él nos ha mandado a predicar al pueblo y a testificar que él es el que Dios ha puesto como Juez de los vivos y de los muertos.

  • Hechos 10:43

    Todos los profetas dan testimonio de él, y de que todo aquel que cree en él recibirá perdón de pecados por su nombre.

  • Hechos 10:44

    Mientras Pedro todavía hablaba estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían la palabra.

  • Hechos 10:45

    Y los creyentes de la circuncisión que habían venido con Pedro quedaron asombrados, porque el don del Espíritu Santo fue derramado también sobre los gentiles;

  • Hechos 10:46

    pues les oían hablar en lenguas y glorificar a Dios.

  • Hechos 10:47

    Entonces Pedro respondió: — ¿Acaso puede alguno negar el agua, para que no sean bautizados estos que han recibido el Espíritu Santo, igual que nosotros?

  • Hechos 10:48

    Y les mandó que fueran bautizados en el nombre de Jesucristo. Entonces le rogaron que se quedara por algunos días.

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