• Jeremias 3:6

    El SEÑOR me dijo en los días del rey Josías: “¿Has visto lo que ha hecho la apóstata Israel? Ella ha ido a todo monte alto; y bajo todo árbol frondoso, allí se ha prostituido.

  • Jeremias 3:7

    Y dije: ‘Después que ella hizo todo esto, volverá a mí’. Pero no volvió; y lo vio su hermana, la desleal Judá.

  • Jeremias 3:8

    Ella vio que precisamente porque la apóstata Israel había cometido adulterio, yo la había despedido y le había dado carta de divorcio. Pero su hermana, la desleal Judá, no tuvo temor; más bien, fue y se prostituyó ella también.

  • Jeremias 3:9

    Y sucedió que a causa de que su prostitución le era liviana, se prostituyó con la piedra y con el árbol, y profanó la tierra.

  • Jeremias 3:10

    Con todo esto, su hermana, la desleal Judá, no volvió a mí con todo su corazón, sino con falsedad”, dice el SEÑOR.

  • Jeremias 3:11

    El SEÑOR me dijo además: “Más justa es el alma de la apóstata Israel que la de la desleal Judá.

  • Jeremias 3:12

    Ve y proclama estas palabras hacia el norte. Dirás: ‘Vuelve, oh apóstata Israel, dice el SEÑOR. No haré caer mi ira sobre ustedes, porque soy misericordioso, dice el SEÑOR. No guardaré enojo para siempre.

  • Jeremias 3:13

    Solo reconoce tu maldad, porque contra el SEÑOR tu Dios te has rebelado, has repartido tus favores a los extraños bajo todo árbol frondoso y no has escuchado mi voz’, dice el SEÑOR.

  • Jeremias 3:14

    “¡Vuélvanse, oh hijos rebeldes, porque yo soy su señor!, dice el SEÑOR. Los tomaré, uno por ciudad y dos por familia, y los traeré a Sion.

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