• Jeremias 4:20

    Quebranto sigue a quebranto, porque toda la tierra es devastada. ¡De repente son devastadas mis moradas; en un momento, mis tiendas!

  • Jeremias 4:21

    ¿Hasta cuándo habré de ver la bandera y tendré que oír el sonido de la corneta?

  • Jeremias 4:22

    Porque mi pueblo es insensato; no me conocen. Son hijos ignorantes y carentes de entendimiento. Son expertos para hacer el mal, pero no saben hacer el bien.

  • Jeremias 4:23

    Miré la tierra, y he aquí que estaba sin orden y vacía. Miré los cielos, y no había en ellos luz.

  • Jeremias 4:24

    Miré las montañas, y he aquí que temblaban; todas las colinas se estremecían.

  • Jeremias 4:25

    Miré, y he aquí que no había hombre, y todas las aves del cielo habían huido.

  • Jeremias 4:26

    Miré, y he aquí que la tierra fértil era un desierto. Todas sus ciudades habían sido devastadas ante la presencia del SEÑOR, ante el ardor de su ira.

Continúa después de la publicidad