• Juan 6:51

    Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno come de este pan vivirá para siempre. El pan que yo daré por la vida del mundo es mi carne.

  • Juan 6:52

    Entonces los judíos contendían entre sí, diciendo: — ¿Cómo puede este darnos a comer su carne?

  • Juan 6:53

    Y Jesús les dijo: — De cierto, de cierto les digo que si no comen la carne del Hijo del Hombre y beben su sangre, no tienen vida en ustedes.

  • Juan 6:54

    El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el día final.

  • Juan 6:55

    Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida.

  • Juan 6:56

    El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí, y yo en él.

  • Juan 6:57

    Así como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, de la misma manera el que me come también vivirá por mí.

  • Juan 6:58

    Este es el pan que descendió del cielo. No como los padres que comieron y murieron; el que come de este pan vivirá para siempre.

  • Juan 6:59

    Estas cosas dijo en la sinagoga cuando enseñaba en Capernaúm.

  • Juan 6:60

    Entonces, al oírlo, muchos de sus discípulos dijeron: — Dura es esta palabra; ¿quién la puede oír?

  • Juan 6:61

    Sabiendo Jesús en sí mismo que sus discípulos murmuraban de esto, les dijo: — ¿Esto los escandaliza?

  • Juan 6:62

    ¿Y si vieran al Hijo del Hombre subir a donde estaba primero?

  • Juan 6:63

    El Espíritu es el que da vida; la carne no aprovecha para nada. Las palabras que yo les he hablado son espíritu y son vida.

Continúa después de la publicidad