• Levítico 1:5

    Entonces degollará el novillo en presencia del SEÑOR, y los sacerdotes hijos de Aarón ofrecerán la sangre rociándola por encima y alrededor del altar que está a la entrada del tabernáculo de reunión.

  • Levítico 1:6

    Después desollará la víctima del holocausto y la cortará en pedazos.

  • Levítico 1:7

    Luego los hijos del sacerdote Aarón pondrán fuego sobre el altar y acomodarán la leña sobre el fuego.

  • Levítico 1:8

    Después los sacerdotes hijos de Aarón acomodarán los pedazos, la cabeza y el sebo encima de la leña que está en el fuego sobre el altar.

  • Levítico 1:9

    Y el sacerdote lavará con agua las vísceras y las piernas, y las hará arder todas sobre el altar. Es un holocausto, una ofrenda quemada de grato olor al SEÑOR.

  • Levítico 1:10

    “Si su ofrenda para el holocausto es del rebaño, ya sea de las ovejas o de las cabras, ofrecerá un macho sin defecto.

  • Levítico 1:11

    Lo degollará delante del SEÑOR, al lado norte del altar; y los sacerdotes hijos de Aarón rociarán su sangre por encima y alrededor del altar.

  • Levítico 1:12

    El sacerdote lo cortará en pedazos y los acomodará, junto con la cabeza y el sebo, encima de la leña que está en el fuego sobre el altar.

  • Levítico 1:13

    El sacerdote lavará con agua las vísceras y las piernas; las ofrecerá todas y las hará arder sobre el altar. Es un holocausto, una ofrenda quemada de grato olor al SEÑOR.

  • Levítico 1:14

    “Pero si su ofrenda para el SEÑOR es un holocausto de aves, presentará su ofrenda de tórtolas o de pichones de paloma.

  • Levítico 1:15

    El sacerdote la llevará al altar, le arrancará la cabeza, la hará arder sobre el altar y exprimirá su sangre sobre un lado del altar.

  • Levítico 1:16

    Le quitará el buche y las plumas, y los echará en el lugar de las cenizas que está al lado este del altar.

  • Levítico 1:17

    El sacerdote la partirá por las alas, pero sin dividirla en dos, y la hará arder encima de la leña que está en el fuego sobre el altar. Es un holocausto, una ofrenda quemada de grato olor al SEÑOR.

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