• Salmo 112:1

    ¡Aleluya! Bienaventurado el hombre que teme al SEÑOR y en sus mandamientos se deleita en gran manera.

  • Salmo 112:2

    Su descendencia será poderosa en la tierra; la generación de los rectos será bendita.

  • Salmo 112:3

    Bienes y riquezas hay en su casa; su justicia permanece para siempre.

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